Caracterización Laboratorio Hip Hop y Banda Rap Core Periferia

En los procesos de configuración de los usos del arte en la cultura popular para hacer movilización social y transformación de formas de vida cotidiana; las acciones colectivas proyecto laboratorio de hip-hop y Banda RAP-Cor Periferia vienen enfrentando y oponiéndose a las problemáticas generadas en la época del “brutalismo” de la sociedad capitalista como: la desesperanza y las violencias privadas y públicas con el estilo musical afroamericano Rap-Core de ritmo y movimiento contrario al movimiento musical natural, en contratiempo y con letras provocadoras y la pedagogía del hip-hop como arte para liderar con fuerza y oponerse.

El proyecto de Laboratorio Hip Hop y la Banda Rap-core Periferia, aunque son dos Acciones Colectivas, articulan sus trayectorias y sus propuestas artístico-pedagógicas a través de una de sus integrantes [1] . El Proyecto laboratorio Hip-Hop, sitúa su trabajo educativo en las comunidades y en los lugares de origen y construcción histórica del Hip-Hop, los espacios comunitarios, auto gestionados, territorios marginales y periféricos de las ciudades, la clase obrera y popular, las comunidades negras y latinas y la banda Rap Core Periferia es un proyecto artístico que surge en el Sur oriente Bogotano en el 2019.

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[1] Con estas dos acciones colectiva decidimos trabajar de la siguiente manera: desarrollamos la estrategia de los Círculos de Estudio y reflexión con las integrantes del Laboratorio Hip Hop y las observaciones participantes con la Banda Rap Core Periferia, dado que, en este año, aunque el Laboratorio se encuentra en un momento de pausa en sus acciones de proyección social. Consideramos de gran importancia las reflexiones en torno a su trayectoria y sus apuestas pedagógicas, muy pertinentes para nuestro proyecto y que se pueden contrastar y enriquecer con la experiencia de la Banda Rap Core Periferia.

Para el caso del Hip Hop, este es un lugar elegido, de resistencia, de disputa y posicionamiento personal de los HipHoppers en las experiencias del “No lugar” el “no valor” y la exclusión. Desde sus orígenes son los y las indeseados(as), los negados y las negadas por la cultura hegemónica patriarcal, quienes responden a las convocatorias del hip-hop, el cual está en todo, responde al sentir, al vivir y a las preocupaciones, al crear, es decir, atraviesa el cuerpo, aquí se evidencian las luchas de los sujetos(as) del hip-hop. D. Sánchez (comunicaciòn, 18 de noviembre, 2022).

Desde los géneros musicales hip-hop y el Rap-Core se están creando espacios de enunciación, de denuncia, de toma de posturas ante las realidades de violencias de género, los abusos, la estigmatización y la exclusión que se encuentra en “la calle”, “en el lugar de construcción de si, en el encuentro con los otros y las otras en los…” “Sin Lugar”: sistema carcelario y todos los lugares demás habitados por el patriarcado para transformar el mundo”.

Desde los géneros musicales hip-hop y el Rap-Core se están creando espacios de enunciación, de denuncia, de toma de
posturas ante las realidades de violencias de género, los abusos, la estigmatización y la exclusión que se encuentra en “la calle”, “en el lugar de construcción de si, en el encuentro con los otros y las otras en los…” “Sin Lugar”: sistema carcelario y todos los lugares demás habitados por el patriarcado para transformar el mundo”.

Además, son espacios de construcción de identidad cultural. Estos géneros de la música catalizan las trayectorias y expresiones de rebeldía y revolución individuales para hablar a través de las letras y la música “de lo que nos atraviesa” como personas y de las coyunturas como el estallido social, son un modo de vida, son
una elección sobre el lugar que quieres ocupar en el mundo.

Así, ambas acciones colectivas se sitúan al interior de la caminada histórica del Hip Hop y de sus apuestas sociopolíticas y su vinculación efectiva con los sectores populares y empobrecidos, en donde estos toman voz, se empoderan y encuentran nuevas formas de habitar el mundo. De esta manera, los y las integrantes del Laboratorio y de la Banda Rap. Conciben el Hip Hop como un lugar de vida y de enunciación, que cifra transformaciones profundas en las formas de vida de sus integrantes, primeramente. El Hip Hop, vivido de esta manera es, no solo una práctica artística sino y un proyecto y una opción de vida que traslapa las opciones vitales de quienes lo viven.

El laboratorio Hip Hop se ubica como una ventana pedagógica hacia el mundo del Hip Hop. Es, en palabras de sus integrantes, (2016) “una propuesta de experimentación pedagógica, artística e investigativa enmarcada en la Educación del Hip Hop”, existente desde el año 2016 como fruto de un proceso que se denominó en su momento Escuela de Rap Libertario. Entre sus principales objetivos se encuentra el potenciar espacios educativos no escolarizados en donde los Hiphopers y personas interesadas puedan conocer y explorar las muchas posibilidades que ofrece la cultura del Hip Hop.

El laboratorio desde sus perspectivas pedagógicas entiende así el Hip Hop como un escenario de construcción de sentidos que pasa por pedagogías abiertas en las que no siempre hay un lugar de llegada predeterminado sino una práctica creativa y reflexiva exploratoria que permite la reflexión y la vuelta sobre el sí mismo en las y los participantes del proceso. Esto genera unos procesos circulares en los que la Educación Popular aporta desde sus concepciones y metodologías a la pedagogía del Hip Hop, pero al mismo tiempo se ve rebasada y enriquecida con la vocación histórica del Hip Hop sus preguntas, sus intencionalidades y sus metodologías.
El nombrar el proceso como una pedagogía del Hip Hop, invita a reflexionar y a describir las intencionalidades históricas del Hip Hop las cuales buscan levantar, movilizar, invitar a nuevas miradas de la realidad, las formas como nos relacionamos con los territorios de la forma como nos ponemos ante ella y la transformamos. La pedagogía del Hip Hop, se convierte de esta manera en una pedagogía de la pregunta que pasa por la problematización misma del Hip Hop y de sus prácticas culturales, entre las que se encuentran sus patrones machistas, su dependencia de los
presupuestos estatales, la estigmatización social.
La educación Hip Hop, aunque puede ser un término polémico y aún inacabado. Podría ser concebido como una de tantas expresiones de la Educación popular y comunitaria, que, con sus propias metodologías, construye colectivamente saberes que buscan transformar las realidades de sus contextos en las que confluyen múltiples formas de exclusión y opresión. Este posicionarse en medio de la realidad implica para los y las Hiphopers, una construcción del propio lugar en el mundo, que les ha exigido revisar sus visiones de mundo, sus formas de entenderse a si mismos y
a si mismas ante el entorno. Es decir, el Hip Hop como lugar de enunciación ofrece pedagogías de construcción y reconstrucción de las identidades individuales y grupales de quienes se vinculan a la cultura y a las propuestas culturales y políticas del Hip Hop.
El uso del arte en la Banda Rap Core Periferia, es, desde el arte popular y el lenguaje urbano, fácil de captar e identificar. Es música realizada, aunque va dirigida a la sociedad en general, convoca e identifica a los jóvenes populares que viven y se construyen desde los márgenes de las grandes urbes. Insertos en la trayectoria cultural y social del Hip Hop. La Banda de Rap Core ubica sus producciones como alternativa contracultural frente a las estructuras hegemónicas de injusticia, pobreza, muerte y exclusión a que se ven abocados los jóvenes populares en Colombia.
El género Rap Core es una mezcla entre el rap y el hardcore, que define la propuesta artística y sonora de la Banda, quienes consideran esta como una propuesta artística innovadora que atrae o cautiva el interés de los y las jóvenes.
Como lo refieren las otras acciones colectivas, para la Banda Rap Core Periferia también son muy importantes las dinámicas y los procesos de vinculación que se viven al interior de los escenarios del Hip Hop. La búsqueda de nuevas formas de relacionamiento exige reflexión personal, autoobservación y gestión de la identidad propia en relación con los horizontes culturales y de sentido que propone el mundo del Hip Hop.
En este sentido, pertenecer al mundo del Hip Hop es a su vez un proceso personal y colectivo de construcción de identidades individuales y colectivas. Encontramos en la banda un espíritu colaborativo y constructivo en el que como grupo dialogan y buscan soluciones rápidamente cuando se les presenta algún inconveniente o se sienten insatisfechos con el ensayo.

Es de suma importancia que el ensayo, los tonos musicales, la energía, la música y los equipos suenen de una manera calidad y amena para armonizar y darle un sentido de energía a lo que están ensayando. Entre sus usos expresivos visten con un estilo urbano y fresco, cómodo para el ensayo, mientras que en las presentaciones usan trajes icónicos de los sectores populares.
Entre su gestualidad a la hora de realizar arte son sujetos caracterizados con poder, identidad y atributo en afirmar y decir lo que piensan y sienten a través del arte y la música. Consideran que es una manera de denunciar y enunciar el mundo como lo ven. Afirman que es una manera de construir otras formas de militar de hacer militancia en los barrios y los jóvenes de descentralizar cosas que están centralizadas como el conocimiento y de tener discusiones que están dentro de lo académico.
Una de las tradiciones del Rap y que la banda conserva es la creación de sus propias letras y propuestas musicales, lo que exige a cada banda y a los vocalistas un ejercicio continuo de observación y reflexión de la realidad. Entre sus canciones tocan asuntos delicados de realidad, evidenciando problemáticas políticas y sociales y apuntando a lugares problémicos que la sociedad evade o desconoce. Encontramos, por ejemplo, en su canción “Presxs Politicxs” una denuncia de lo que estas personas hombres y mujeres viven en las cárceles, descritas como el “basurero” de un
proyecto social que se encubre en los privilegios y el poder, y despoja la vida de los pobres tras los
muros y las rejas.
En el horizonte de la transformación social desde el Rap, como lo dice “Tatiana 2 ”, “una apuesta
política que le da ritmo a la Rebeldía”.
Como agrupación se integran por interés e ideas en común como dicen ellos(a) “desde lo combativo”. Por otro lado, denuncia desde los procesos de educación en el Hip-Hop a la industria cultural capitalista y anuncia desde esta misma las acciones y dinámicas organizativas y barriales de los territorios y los movimientos sociales” (Molina & Palacio, 2021).

Las interpretaciones en la investigación confirman la banda y el proyecto de laboratorio tienen claves con las cuales dan solides a la configuración de los usos del arte en la cultura popular, por un lado, el carácter contestatario del Rap-Core el cual lo hace una apuesta combativa que reúne y por el otro lado, el estilo problematizador de la “pedagogía del hip hop” la cual es una creación con identidad propia y con la cual se pone de relieve, se reconoce su trayectoria y su
correspondencia con el trabajo de las “pedagogías comunitarias”.
El laboratorio con la pedagogía del hip-hop centra la problematización y el cuestionamiento a la masculinización de este género musical, las practicas sexistas que perviven en sus escenarios y la industria cultural en el sistema capitalista. Otro recurso en el cual se destacan aspectos para la configuración de los usos del arte a la cultura popular por parte del proyecto de laboratorio Hip- Hop, es la “pedagogía de la calle”.
Es más, la “pedagogía de la calle” es otro tipo de pedagogía, la cual se desencadena de la
pedagogía del hip-hop; está sustentada desde las reflexiones de las dinámicas en el lugar central

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[2] Vocalista del grupo.