La práctica pedagógica tiene lugar tanto en el ciclo de fundamentación como en ciclo de profundización, lo que posibilita la integración de los diferentes espacios académicos, a partir de los problemas que direccionan la formación en cada nivel, y se asume como un escenario de problematización de la realidad educativa y escolar, con miras a la consolidación de un discurso pedagógico que permita interrogar el hacer de los maestros en formación. Se opta por la realización de prácticas en contextos reales de intervención, en donde el estudiante se encuentre con la complejidad de la escuela, sus dinámicas de socialización y de conexión con el conocimiento, a fin de dinamizar sus aprendizajes y reflexiones, al actualizar a través de la experiencia la relación teoría-práctica-teoría.
Para la realización de la práctica se perfilan dos modalidades:
La práctica pedagógica en la LEBP es transversal a la formación. Inicia en el tercer semestre e implica, por parte del estudiante, la disposición de tiempos adicionales para asistir de manera presencial a las instituciones educativas donde se lleve a cabo este proceso. Las instituciones educativas donde se lleva a cabo la práctica deben tener convenio con la Universidad y se asistirá a estas bajo el acompañamiento de los profesores del eje de prácticas.
La práctica se divide en dos fases, a saber: la del ciclo de fundamentación donde el estudiante se acerca a la realidad educativa, la comprende y la interviene a través de diferentes propuestas de enseñanza y de prácticas pedagógicas diversas que se viven en las instituciones; y del ciclo de profundización la cual estará articulada al seminario de profundización y, en muchos, casos de esta se derivará la construcción de los trabajos de grado.
Para el caso de las y los egresados de las Escuelas Normales Superiores, es posible realizar el estudio de homologación donde se reconozcan las prácticas del ciclo de fundamentación. Las del ciclo de profundización no son homologables.
Se adjuntan los lineamientos de práctica.